Actualmente, dado que el desarrollo tecnológico avanza más rápido de lo que muchas personas pueden seguir, la información está cada vez más digitalizada. En este sentido, el Gobierno Federal también tiene un plan en acción para digitalizar a los más de 200 millones de brasileños, previniendo fraudes y delitos de identidad. Hablamos del Documento Nacional de Identidad, o DNI. Entiéndelo mejor a continuación.

Bueno, fue hace unos años que surgió el proyecto de unir y digitalizar los documentos de los ciudadanos brasileños. Así, aprobado por el Congreso en 2017, la elaboración del DNI, o Documento Nacional de Identidad, comenzó lentamente. El objetivo era reunir documentos como CPF, Licencia Nacional de Conducir y Título Electoral, todo en un solo lugar.

Además, con la posibilidad de verificación biométrica, la idea es reducir los casos de fraude que se producen con la falsificación de identidad. De hecho, esto debería beneficiar incluso al sistema penitenciario, ya que al registrar a todos los brasileños, ya no habrá casos de personas invisibles en el sistema. Además, el DNI elimina los problemas de personas con el mismo nombre, ya que debe utilizar la biometría como identificación.

Según el presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE), Luís Alberto Barroso, Brasil debería emerger como un universo digital con la implementación del DNI. De hecho, esta será la primera aplicación de este tipo en América y actualmente Brasil ocupa el séptimo lugar en el ranking de gobiernos digitales.

Además, el NIS/PIS/PASEP, el Número de Tarjeta de Trabajo y Seguridad Social, la Tarjeta Nacional de Salud, el Certificado Militar y el Documento de Identidad Profesional deben subirse al carro del Documento Nacional de Identidad. Por tanto, la implantación del DNI deberá extinguir también la prueba general de vida realizada por el INSS. Cada año, personas mayores y personas en situación de vulnerabilidad necesitan acudir a las oficinas públicas para acreditar su vida.

Así, el ministro de Economía, Paulo Guedes, celebra la alianza entre el Poder Judicial y el Ejecutivo y destaca la importancia de los datos biométricos, sin los cuales otros servicios no estarían activos hoy. El Documento Nacional de Identidad debería iniciar su primera fase en marzo de este año, pero en la prueba sólo deberían participar empleados del Tribunal Electoral y otros organismos públicos.